Con dos resultados algo sorpresivos se dio inicio a los cuartos de final de la competencia europea.
Sorprendió un poco los resultados de esta jornada. En la llave más pareja entre el Real Madrid y el Liverpool, reeditendo la final del 2018, los dos equipos llegaban con bajas en sus zagas centrales. Con el positivo de Varane y la ya conocida lesión de Sergio Ramos, Zinedin Zidane tuvo que salir con Nacho y Éder Militão, mientras que Klopp le dio la oportunidad a Phillips y el turco Kabak.
El partido tuvo en un primer plano como protagonista al Real Madrid, que comandaba las acciones y dejaba a Vinicius y a Asensio como encargados del ataque con la complicidad de Benzema, mientras tanto el Liverpool esperaba y trataba de plantear más un juego reactivo. Se presentaron unas oportunidades y después se sumergieron en un duelo por el control del mediocampo.
Hasta que el equipo visitante en Valdebebas, en el estadio Alfredo Di Stefano, intentó salir un poco más, dejó espacios atrás que aprovechó Toni Kroos para filtrar un pase certero entre el lateral derecho y el central, balón que controló Vinicius con el pecho y definió muy bien contra Alisson. Con la ventaja salió más el Liverpool para buscar el empate.
Con un buen trabajo táctico el equipo ‘Merengue’ controló los intentos de los ‘Reds’. Tras un nuevo balón al fondo y una pésima devolución de Trend Alexander Arnold, Marco Asensio se sacó al portero brasileño con un ‘sombrerito’ y definió casi debajo del arco con un toque. Así se fueron a descanso. Para el segundo tiempo el Madrid salió confiado y el Liverpool fue más intenso.
Esa presión e iniciativa le dio el descuento a los ingleses, cuando Diogo Jota se internó en el área, remató encima de Modric y el rebote le quedó a Mohamed Salah que estaba habilitado por centímetros, y el egipcio puso el 2-1. Se equilibraron más las cosas y el Real intentó sacudirse siendo más profundo y constantes por las bandas, Thiago Alcantara entró para el Liverpool en busca de controlar más el balón.
De un saque lateral por la banda de Robertson, Karim Benzema aprovechó para tocar a Modric quien habilitó a Vinicius en el punto penal y de primera como venía la puso rastrera a contra pie de Alisson que no pudo responder con sus reflejos. Luego entraría Federico Valverde y el Madrid le daría más manejo al partido prestando atención atrás. El Liverpool terminó el partido como si no quisiera recibir más goles y sin respuesta clara. Ventaja para los ‘Blancos’.
El otro partido del día fue en Manchester, donde el City dominó el juego y se puso en ventaja con un gol de Kevin De Bruyne tras una contra del equipo de ‘Pep’ Guardiola, el belga aprovechó un pase atrás de Riyad Mahrez para mandar el balón al fondo. A los pocos minutos el juez central sancionó una pena máxima por una presunta imprudencia de Emre Can. Cuando el arbitro central fue al monitor del VAR cambió de decisión y dijo que no había infracción.
El Borussia Dortmund busco tener más el balón, pero el partido entró en un bucle donde dominaba el equipo de ‘Pep’ teniendo demasiada precaución con un posible ataque de Earling Haaland. El segundo tiempo inició igual, se dieron las modificaciones y solo hasta el minuto 84 se volvería a mover el marcador, una jugada hilvanada desde el centro del campo, gran habilitación del delantero noruego que estaba cómo pivot, y Marco Reus se internó para vencer a Ederson.
El partido parecía cerrado, sorpresivo resultado que era como oro para los alemanes. La intensidad y gallardía del City terminó bombardeando el área de los ‘aurinegros’, que nuevamente se complicaron con un balón al fondo y Gündoğan habilitó con un pase atrás a Phil Foden, que salvó los papeles del Manchester City. Ventaja de los ingleses pero un gran resultado para los alemanes de cara al juego de vuelta.
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