La IWF ha comenzado una misión de rescate para salvar el deporte y cambiar la visión que tiene el COI de las pesas.
En medio de la crisis que afronta la IWF, tras el ultimátum del COI sobre la permanencia de la disciplina en el programa olímpico para 2024, la federación ha decidido posponer las elecciones de junta directiva que tendrían este mes y además se comprometió a darle a los representantes de los atletas voz y voto en la Junta Ejecutiva.
Las acciones de la IWF responden al largo descontento del Comité Olímpico Internacional con el gobierno de la federación, pero sobretodo con la incapacidad que han tenido los miembros en dar a los atletas voz y voto, entre otras cosas la molestia del COI han sido por la negativa de la IWF a recibir consejos de otras entidades, las reglas antidopaje que han adoptado que son consideradas “blandas” y también el negarse a cambiar la constitución interna para desarrollar unas elecciones más transparentes.
Ante la situación compleja, los miembros actuales de la Junta Directiva han votado para que los representantes de los atletas puedan tener un voto en las próximas reuniones de la junta ejecutiva.
En cuanto a las elecciones que estaban programadas para el 26 y 27 de marzo han sido reprogramadas para el 29 y 30 de abril.